Las ideas políticas tienen el poder de meterse en la mente y, como si de una secta se tratara, dejas de pensar individualmente, para pensar lo que el partido quiere que pienses.
Se llegan a perdonar abusos, corrupciones y se buscan en el adversario ideológico trapos sucios para tapar los del partido de su simpatía. La política tiene el poder manipulador más rastrero que puede existir, consigue captar adeptos a una ideología anulando la propia libertad de pensamiento.
Todos hemos visto discusiones acaloradas entre amigos y familiares que acaban en auténticas batallas campales dialécticas, casi físicas o incluso físicas. La energía negativa se va adueñando de la situación provocando odio. Hay que imponer las ideas cueste lo que cueste.
Se ha tomado partido por una ideología y ya no se piensa cada tema individualmente, sino lo que la maquinaria de la ideología exige. La política consigue que sus simpatizantes ideológicos hipotequen ideológicamente sus vidas para así mantener poder sobre la población.
Una democracia basada en este tipo de ideologías no es tal. Un pueblo encasillado y enrocado en una idea política fija del color que sea desnaturaliza cualquier democracia.
¿Como puede entenderse que una persona que entra a formar parte de un partido político, defienda todas y cada una de sus posiciones? Es fácil, a vendido su alma a ese "diablo" que es el aparato del partido, dejando de tener ideas propias para ser el peón de los superiores a cambio de un puñado de monedas.
La energía negativa se palpa en los debates televisivos y en las cadenas propagandísticas, esclavas de ideologías manipuladoras. Es una energía que promulga el odio hacia quien piense diferente. Gritos, insultos, amenazas son constantes. La negatividad es tan grande que inducen a una parte de la población a odiar a la otra parte, a sentir y desear su exterminio ideológico y desgraciadamente, como la historia ha demostrado, también físico.
Vivimos en una falsa democracia, dirigida por personas falsas y manipuladoras cuyo objetivo es que no pienses, ellos pensarán por ti.
Si eres sincera contigo misma, reconocerás que a veces has defendido actitudes de una ideología que no está acorde con lo que tu interior te dicta. Has disculpado actitudes, exponiendo los mismos argumentos que ellos exponen.
No debería ser así, somos personas libres y el pensamiento debe ser libre. Lo normal sería estar deacuerdo con algunas cosas de un partido y también con algunas cosas del resto de los partidos. Lo normal sería estar en contra y criticar abiertamente lo que no te parezca bien, proceda del partido que sea. Desgraciadamente eso que, debería ser normal, es muy poco habitual.
Libérate de esas cadenas, piensa por ti misma y sorprende a tu entorno criticando o alabando sin tener en cuenta ideología política. No entres en su juego. Libérate.
Feliz viernes.
Manuel
En mi humilde opinión, este post es ¡GENIAL! Gracias
ResponderEliminar¡FANTASTICO SWAMI por tanto en tan poco espacio! Recibimos tantas palabras engañosas en todo momento, que sin casi notarlo, nos arrastran a "no pensar" a seguir siendo dependientes, a seguir siendo esclavos mentales...PENSEMOS LIBREMENTE...Que no nos acostumbren a aceptar lo que responsablemente no compartimos.....¡GRACIAS! ...Elisa
ResponderEliminarAsi es, Maestro, en nombre de la libertad se somete al pueblo al dictamen y capricho de los politicos, en nombre de la libertad se "aguillotina" al que piensa distinto, habla un idioma distinto, o procede de lugares distintos, todos los extremos son malos, pues todos los extremos se tocan, y la bioolaridad politica hace muchísimo danyo a la gente, al fin y al cabo...todos cuando estemos en la caja....somos iguales,,,, de nada sirve ser o hablar un idioma, ser independentista, ser otra cosa,,,, etc... es penoso la ezquizofrenia de este pais. GRACIAS SWAMI,!,,,
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo contigo, sensacional gracias, feliz fin de semana, un fuerte abrazo
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