viernes, 25 de abril de 2014

Peligro del exceso de pensamiento positivo. El caso de Isabel.



La filosofía del pensamiento positivo, de la cual estoy en la mayor parte deacuerdo, como todas las filosofías, religiones y movimientos ideológicos, cuando se lleva al extremo, puede resultar contraproducente.

La vida es una sucesión de hechos que nos afectan positiva y negativamente. Alegrías y tristezas se suceden y nos amoldamos a ellas. Momentos felices y momentos que no lo son, pero que forman parte de lo que es la vida. Aprendemos de todas las circunstancias. 

El pensamiento positivo es un entrenamiento mental encaminado a afrontar las circunstancias de la vida con optimismo para atraer  lo positivo (ley de la atracción). Una forma maravillosa de afrontar la vida. Pero los que lo practican de forma extrema, dejan de experimentar, o se tapan, sensaciones difíciles que hay que vivir.

No es el primer caso que me llega de personas extremadamente positivas, que practican el pensamiento positivo extremo y un día, por un hecho quizás irrelevante, explotan y caen en un pozo ansioso/depresivo considerable.

Son personas que afrontan los problemas, las pérdidas de personas queridas, las circunstancias difíciles con pensamiento positivo. Tapan lo que su interior siente, reflejando positividad para ayudar a los suyos en momentos difíciles. Tanta presión interior acumulada les puede llevar a situaciones límites.

El último caso concreto  (me ha dado permiso para esbozarlo) es de una mujer, Isabel, que afrontaba los problemas siempre con la mayor de las sonrisas. Su vida era su familia, su entorno, que vieran en ella el pilar donde apoyarse. Y así lo hizo y lo consiguió durante muchos años. Perdió a una hija en un accidente de tráfico y dentro del dolor, lo afrontó con extrema positividad. Ahogaba su pena interna con capas de positividad externa  para que los demás vieran en ella un referente. Ayudó a que los suyos superaran esa pérdida. El pensamiento positivo cumplió su misión y su familia volvió (en lo posible) volver a ser feliz.

Su pareja perdió el trabajo pero ella consiguió impregnarle de positividad y al poco tiempo y pese a tener 53 años, consiguió un trabajo mejor. Las ondas positivas con su efecto retorno funcionaban.

Una mañana, al levantarse, se sintió mal, pesada, malhumorada, un malestar interno que nunca había sentido. Pensó afrontar el día con su maravillosa arma positiva. Cuando estaba preparando el té, la taza que su hija siempre utilizaba y que ahora era su taza, se le resbaló incomprensiblemente de las manos y se rompió en mil pedazos. Se quedó quieta, de pie,  mirando los trozos que se esparcían por el suelo de la cocina. No decía nada. Su marido y su hijo que se levantaron inmediatamente al oír el ruido, se miraron extrañados al ver la expresión de su madre. Seguía quieta, de pie, mirando el suelo. Le abrazaron con cariño al ver que algo estaba pasando, le preguntaban, pero Isabel no oía nada y tampoco veía nada pues sus ojos se inundaron de lágrimas y empezó a llorar de forma silenciosa y profunda. Eran las lágrimas de su alma. Las lágrimas que debió derramar cuando por ayudar a los demás, no las derramó. Su alma lloraba desconsoladamente. 

Arrodillada en el suelo de la cocina, con su familia intentando sentarla, recogía palpando el suelo con las manos, los trozos de cerámica de la taza. Todo se había venido abajo. Cada trozo de esa taza era una circunstancia vivida que ella tapo con su exceso de pensamiento positivo. 

Lloró durante días todo lo que no había llorado nunca. Se dejó querer, arropar, abrazar, consolar tal como ella había hecho siempre por los demás.

Cuando me llamó, sus primeras palabras fueron: "Manuel, he aprendido a llorar"

Como he dicho antes, la vida, es una sucesión de hechos que nos afectan positiva y negativamente, es cierto. El pensamiento positivo es necesario para atraer lo positivo y ayudar al entorno, es cierto. Pero somos humanos y  lo que nos creó o el que nos creó puso las lágrimas en nuestros ojos por alguna razón.

Gracias Isabel.

Feliz viernes.

Manuel

jueves, 24 de abril de 2014

Somos lo que respiramos, lo que comemos, bebemos y vivimos.




Sin caer en radicalismos de los que huyo, y respetando cualquier posición, pues nadie tiene que creerse en posesión de la verdad e imponer sus ideas, voy a dar mi opinión actual (si, actual, pues las opiniones es sano que cambien con las experiencias de la vida) sobre los hábitos diarios.

Somos lo que respiramos. El aire que nos envuelve, el que respiramos, es el que purifica nuestro organismo, nuestra mente y de rebote nuestro espíritu. Lo que respiramos y como respiramos puede ser causa de salud, enfermedad o desequilibrio energético. Ambientes cargados, poco ventilados no son beneficiosos. Ventilar bien las estancias de la casa, del trabajo. Tener la sana costumbre de airear la habitación antes de ir a dormir, ayuda a mejorar la calidad del descanso. Realizar el ejercicio diario de respirar conscientemente a ser posible en el exterior, mejorará nuestro estado general. No cuesta tanto, aprovechando cualquier desplazamiento a pie, sencillamente pararse en un lugar y hacer unas respiraciones conscientes. Quizás un solo minuto es suficiente. Repítelo las veces que puedas durante el día. Incluso en tu casa, con la ventana abierta. Notarás resultados.

Somos lo que comemos. Todo lo que ingerimos ha tenido vida o ha estado relacionado con la vida. Aunque las energías de cualquier elemento vivo desaparecen de él cuando ya no lo están (evolucionan), pueden quedar restos energéticos en ellos. ¿Que energías pueden quedar impregnadas en un animal que ha estado encerrado y hacinado  junto a otros en jaulas diminutas? Evidentemente restos no positivos nada comparables si la vida de ese animal ha transcurrido con cierta armonía. No entro en si comer carne o no influye en nuestras energías, respeto a quien lo hace y a quien decide no hacerlo. Solo que si se puede elegir, siempre hay que tener en cuenta las procedencias. También en cultivos. El abuso de pesticidas llega a la esencia de una pieza de fruta, de verdura… Es de difícil control, pero si es posible y podemos elegir, sin duda nos beneficiará el cultivo ecológico.

Somos lo que bebemos. No me cansaré de reivindicar el poder del agua como el elemento sanador más potente y abundante que la naturaleza nos ofrece. Pero también debemos tener ciertos cuidados. He llegado a beber agua de grifo tan saturada de cloros que resulta imposible que tenga elementos positivos. Todo lo contrario. Hay que tener mucho cuidado en esos casos, pues en lugar de elemento sanador, puede llegar a ser lo contrario. El agua tiene la cualidad de impregnarse de las energías del entorno. Las retiene, tiene memoria. Un agua pura, con memorias positivas, se mezcla con nuestro ser (nuestra agua) impregnando con esa positividad hasta la última célula de nuestro cuerpo. Si ese agua, además de pura, ha sido tratada, cargada con energías vitales, el beneficio se multiplica por mil. Los beneficios de beber en abundancia agua pura son patentes. Salud, aspecto físico, optimismo, buena canalización de energías son los principales. El agua sana. 

Somos lo que vivimos. Es el punto menos concreto, mas abstracto. El entorno y las circunstancias influyen en lo que somos. Los problemas, los nervios, las decepciones, los fracasos, las envidias, las pérdidas, soledades... Junto con las alegrías, los amores, la tranquilidad, los triunfos, las amistades, las risas… Tienen el poder de formación de lo que somos, del Yo. La vida es una sucesión de experiencias positivas y negativas muchas veces necesarias. La forma de afrontarlas, las fuerzas que tenemos para ello, son la esencia de lo que somos. Nuestra forma de actuar ante los avatares de la vida forjan nuestra esencia. Vive coherentemente con lo que piensas. 

Evidentemente somos muchas más cosas que los cuatro puntos mencionados. Os ruego disculpéis la generalización. Cada caso y cada circunstancia es distinto y hace tomar unas decisiones u otras.

Feliz jueves.

Manuel


martes, 22 de abril de 2014

Vibraciones, las palabras de las energías.



Todo, prácticamente todo emite una vibración, un mensaje energético. La constancia en sensibilizarse a esas vibraciones, o tener un don natural para ser receptiva a ellas, hace que sean comprensibles.

Si nos centramos en las personas, las vibraciones que se emiten son difíciles de enmascarar. Las ondas energéticas resultantes de esa vibración, son las que te dan información sobre esa persona. No todo se debe reducir a malas vibraciones o buenas vibraciones. los problemas afectan, el entorno, el trabajo y hasta la alimentación y el nivel de hidratación corporal. 

Una persona buena puede emitir vibraciones que pueden parecer no positivas, y suele ser debido a circunstancias difíciles por las que se está pasando, o malas energías que está recibiendo.

Por ello hay que ser cauto en la interpretación de esas vibraciones. Nada es blanco o negro. Hay mucho más que analizar. Pero interpretar esas vibraciones, puede ayudarte a alejarte de personas que sin duda van a ser nocivas para tu persona.

Aconsejo alejarse inmediatamente de los que emiten vibraciones claramente negativas, envolventes. Suelen ser personas potentes energéticamente que envuelven con sus energías hasta inmovilizar y conseguir objetivos (principalmente el robo de energías). La primera impresión, la primera vibración, es la que te indica el grado de negatividad. Aún a riesgo de equivocarse a veces, aconsejo alejarse, siempre hay tiempo de rectificar.

Si emites buenas vibraciones y eres consciente de ello, regálalas, emítelas con fuerza y orgullo. Eso hará que a nivel social atraigas personas parecidas a ti.

Cuando en un grupo, en una reunión hay buenas vibraciones, se nota en el ambiente, en la alegría conjunta, en el optimismo, el apoyo, la empatía. Cuando en ese mismo grupo, entra un depredador energético, desaparecen esas buenas sensaciones. Por ello hay que elegir bien las compañías. 

La base es creer en ti. De los errores se aprende, pero a veces, no saber decir NO, puede acarrear serios problemas. Pruébalo, intenta sensibilizar tu nivel vibracional. Nota sensaciones, aprende, juega, prueba. Es una herramienta que el universo ha puesto a nuestro alcance. Utilízala. Con constancia todo se aprende.

feliz martes.

Manuel






viernes, 11 de abril de 2014

Figuras de madera para equilibrar, compensar energías de la casa y neutralizar las negativas . Como prepararlas.



La madera es uno de los cinco elementos del Feng Shui. Es quizás el elemento que más armoniza al resto. A veces, para armonizar la entrada de la casa o una estancia que notamos poco equilibrada de energías, una figura de madera proporciona el equilibrio necesario a la vez que neutraliza negatividades.

Aconsejo una figura de madera limpia de memorias y tratada para neutralizar lo negativo, en la entrada de la casa, en la zona donde se reciba gente de fuera o en la zona del mostrador en negocios cara al público, incluso en la habitación donde duermes. Absorberá lo negativo y lo llevará a tierra, haciendo que no afecten sus negatividades.

Tiene que estar limpia de memorias y tratada para ello pues lo considero necesario para alcanzar el resultado que deseamos. Si la figura no está tratada, también aporta positividad y armonia. Se nota solo ponerla. Pero tratándola, los resultados son mucho mas grandes, como suele ocurrir en casi todas las cosas.

Si tenéis alguna figura en casa de madera, preferiblemente sin ningún tipo de barniz y queréis trabajarla para que sea más efectiva, os digo a continuación como tratarla.


  • Primero de todo, con extremo cuidado y aunque sea de madera, lavarla suavemente con una solución de agua y sal y a continuación con agua sola. Secarla cuidadosamente.
  • Una vez completamente seca, vamos a limpiarla de memorias. Para ello hay que hacer lo contrario que enviar energías. Colocando las manos sobre la figura y con nuestros pies descalzos (para canalizar cualquier memoria no positiva a tierra) absorbemos todo lo que la figura emite, y todo lo hacemos canalizar por nuestro cuerpo hasta los pies y a tierra.  La figura, cuando esté limpia, te dará otra sensación al tocarla. Este proceso puede ser rápido o lento, dependiendo de las manos por las que haya pasado. Normalmente hay que repetirlo varias veces.
  • Ahora hay que trabajarla para el fin deseado. La técnica es parecida al Reiki. Hay que transmitir energía limpia, vital y a la vez con matices de lo que deseas conseguir como proteger, armonizar, equilibrar, neutralizar, incluso si deseas que proteja o ayude a alguien en concreto, enlazar las energías de esa persona con las tuyas, direccionándolas a la figura. Esta es la fase más técnica, difícil y larga. Pero no hace falta que te agotes cargándola de una sola vez. puedes ir dándole energías a medida que te apetezca. la figura las irá asimilando.
Cree en ti. Como todo, si se quiere hacer bien, no es fácil, pero con cierta constancia, se consiguen cosas que nunca te hubieras creído capaz.

He conseguido unas figuras de madera perfectas para lo expuesto. Es la figura de la foto. Madera natural, sin tratar con barnices y que ya de por si, emanan positividad y paz. Las voy trabajando una a una como he detallado para conseguir lo que deseamos. Si a alguien le interesa una de ellas, las he puesto en www.aguadiamantina.es.


Feliz viernes.

Manuel

jueves, 10 de abril de 2014

Martes 15 de Abril, luna llena. Ritual de generosidad.



El martes próximo tenemos la luna llena de Abril, la primera luna llena de primavera en este hemisferio. Me gustaría para los que queráis participar, hacer un ritual muy muy sencillo de generosidad.  El ejercicio consiste en  no pedir por uno mismo, sino por otra u otras personas. 

Sencillamente en la noche del martes, a las 23 horas (hora española), encenderé una vela  y en una pequeña piedra, y con lápiz, escribiré el nombre de la persona que pida. Cada piedra un nombre. Durante unos minutos y con la vela encendida, cogeré la piedrecita con el nombre, pensaré en lo que quiero para esa persona (que desaparezca un mal, que tenga suerte, positividad, salud, alegría, trabajo…) y la dejaré delante de la vela. Lo repetiré piedra a piedra, nombre a nombre. Las dejare junto a la vela  hasta que esta se apague.

Solo eso, nada menos que eso. Desear con todas las fuerzas el bien de alguien.

Esas piedras, mas adelante, cuando puedas, las dejas en el mar o en un río como signo de purificación.

Sería bonito que los que queráis, a la misma hora, hagamos el mismo ejercicio, logrando conectarnos en deseos positivos.


Feliz jueves.

Manuel


Utilizo velas pues simboliza la luz, la energía, el calor, la purificación.

Utilizo piedras pues simboliza fortaleza, resistencia, tierra.

Utilizo lápiz por respeto a la tierra, para que el nombre se disuelva en el mar, en el río, y los deseos que he volcado en él se mezclen con la energía universal de la naturaleza.

miércoles, 9 de abril de 2014

¿Es lícito bloquear energéticamente a alguien que manda malas energías?



Es una constante controversia entre los que nos dedicamos a las energías el actuar para bloquear a alguien que emite negatividad para que deje de hacerlo. 

No somos jueces ni enviados divinos para decidir actuar ante una persona que, bajo nuestro criterio, hace mal con su energía al resto.

Un bloqueo energético a alguien negativo es un tema muy delicado. La forma más efectiva de lograrlo es hacerle un "aura inversa" o "espejo" con la intención que todo lo negativo que emita, le rebote instantáneamente. Sino emite negatividad, no recibe su propia negatividad, si la emite, la recibirá.

Un bloqueo energético de ese calibre, puede hacer que la persona bloqueada deje de canalizar correctamente y entre en una situación de debilidad. Es en este punto donde la controversia es más fuerte. Hay casos de personas muy negativas que aún con el espejo hecho, y recibiendo su propia negatividad, siguen y siguen hasta resultar mal parados. Los que defienden esta forma de actuar, prefieren que el emisor de esa negatividad reciba su propia energía negativa antes que una persona inocente. Las personas que están en contra de esta forma de actuar. alegan que el Universo siempre devuelve la negatividad emitida algún día.

Reconozco que en ese sentido estoy un poco enfadado con el Universo, es lento de respuesta. Muchos son los casos de personas, auténticos diablos, que durante su vida han hecho todo el mal que han querido y no han recibido castigo del Universo.

Como en todo este mundo de las energías, hay que ser cauteloso a la hora de interactuar. Cada caso es un mundo distinto.  Pero reconozco que en algunas ocasiones, yo, junto con otras personas, hemos envuelto a alguien en un espejo para que reciba su propia medicina. Evidentemente son casos muy excepcionales de maldad innata, auténticos demonios. Pero son casos contados, y no me arrepiento de haberlo hecho.

Pienso en las personas inocentes que por envidias, por trabajos encargados, sufren los bloqueos de esos emisores de energías negativas y me convenzo que en casos excepcionales hay que actuar. 

También hemos observado que una gran parte de las personas trabajadas con ese espejo, dejan de emitir negatividad. Se les ha "amaestrado" con su propia medicina y han cambiado su rumbo. Desgraciadamente otros no han rectificado y entran en un gran bloqueo.

Manuel

martes, 8 de abril de 2014

Dolor de alma, sanar el alma.





El dolor va unido a la vida. No existe ni ha existido una vida en la que nunca haya aparecido el dolor. Si hablamos de dolor físico, es la manifestación en nuestros sentidos de un problema en nuestro cuerpo, es el aviso de que algo va mal. En ocasiones el dolor es hasta necesario para ser conscientes de un problema y tomar medidas al respecto. El dolor, cuando desaparece, ha cumplido varias funciones. Una de ellas  es tomar conciencia de lo bien que se está cuando no hay dolor. Desgraciadamente, al estado de ausencia de dolor físico, el estado considerado normal, no se le valora lo suficiente. Sólo quién ha sufrido dolor, aprecia su ausencia.

Hay otro tipo de dolor. También aparece cuando algo falla. Es el dolor del alma. Un dolor intenso, continuo, seco. Un dolor que va dejando huella en lo físico. Es el dolor de una pérdida, de una relación rota. Es el dolor de la soledad, el dolor de la desubicación, de sentirse atrapada en una situación. El alma duele, ya lo creo que duele, y como el dolor físico, indica que algo falla y que hay que tomar medidas.

El alma es tan intangible como real. Muy relacionada con el corazón, con el chakra del corazón. Cuando duele el alma, el dolor físico muchas veces se centra en el centro del pecho. Por eso mucha gente insiste que el alma está situada en ese punto. Creo que el alma está en nuestra energía y creo que el chakra más relacionado con ella es el corazón. 

Cuando el dolor de alma persiste, afecta al cuerpo físico y a otros chakras. Los chakras mas afectados son el 4, 6 y el 7, corazón, frente y corona. Aparece entonces la tristeza, los comportamientos depresivos, ansiedades, etc.

No es fácil sanar el dolor del alma. El alma se sana con una combinación de tiempo y constancia en el trabajo de tus energías, así como en el cuidado del físico. Nadie puede sanar el alma de un día a otro. Para herir un alma, se han traspasado todas las capas de protección. Por eso no es fácil su sanación, pero por supuesto, posible.

No se puede generalizar en los tratamientos para sanar el alma. Cada caso es un mundo, sus circunstancias, los orígenes de ese mal. Y cada solución debe ser adaptada a la persona. El tema más difícil en la sanación del alma, es la implicación de la persona afectada. Las fuerzas fallan, aparece el desánimo, la dejadez, la pérdida de interés, hasta la pereza. Síntomas depresivos normales que quitan fuerzas para trabajarse. 

Las ruedas de energía para revitalizar a la persona afectada, dan dosis de energía para salir adelante. Si la persona afectada no tiene fuerzas para canalizar por si misma, una rueda de energía, un trabajo de chakras con el objetivo de canalizar mejor, son el primer empujón necesario para esa sanación.

El alma herida, se puede sanar. Si es tu caso, toma conciencia de ello y sal de la dinámica en la que ese dolor te ha envuelto. 

Cuenta conmigo.

Manuel

martes, 1 de abril de 2014

Respiraciones para sanar. Ejercicio de sanación por respiraciones.



Las respiraciones conscientes son un método de sanación física y espiritual que siempre recomiendo. Si te fijas, tu respiración automática es la mínima que necesitas, pequeñas inspiraciones seguidas de pequeñas apneas. Simplemente inspiramos el aire mínimo suficiente. 

Si se toma consciencia de ello y durante el día, tres, cuatro o cinco veces, dedicamos algún minuto a realizar respiraciones controladas y profundas, tu interior recibirá un extra de oxígeno muy beneficioso para cualquier proceso sanador. Nuestra Aura, nuestros Chakras, también resultarán beneficiados con todos lo positivo que ello conlleva.

Si tienes la costumbre de pasear, aprovecha esos momentos para realizar respiraciones controladas. Muy aconsejable también cuando meditas, en cada inspiración notarás que tu conexión con el Universo aumenta.

Un ejercicio concreto para intentar sanar una parte determinada de nuestro cuerpo físico es redireccionar el oxígeno inspirado a la zona que quieras sanar. Es un ejercicio de visualización y de autocontrol que no solo te ayudará a sanar, sino que te servirá para tener más control sobre ti misma.

Se trata de inspirar profundamente e inmediatamente, con los ojos cerrados, direccionar ese oxígeno hacia la parte afectada, mientras muy lentamente espulgamos el aire. Si por ejemplo quieres trabajarte una rodilla, inspira, dirige a través de tu cuerpo esa energía sanadora incluida en el oxígeno hasta tu rodilla, notando como pasa desde tu pecho, pasando por tu vientre y bajando por tu pierna hasta la rodilla. Si realizas el ejercicio correctamente, notarás un ligero cosquilleo durante ese recorrido. Es maravillosa esa sensación. Es más sencillo trabajarse por ejemplo el chakra de la frente, quizás para apaciguar un dolor de cabeza. Inspira, dirige esa energía hacia arriba hasta que notes ese cosquilleo mientras expulsas lentamente el aire.

Yo imagino que el dolor, o lo negativo que me produce un mal, lo expulso con la expiración. Inspiro, sano, expiro, expulso.

No es un ejercicio complicado y es realmente efectivo y por supuesto ideal para autocontrol y ser autosuficiente.


Feliz martes.

Manuel